Los menores de dieciocho años de edad generalmente son juzgados ante los tribunales juveniles de California cuando quebrantan la ley. No obstante, la comisión de ciertos delitos puede conducir a que el menor sea juzgado como adulto. Como padre o tutor, pensar que su hijo pueda ser sometido a una pena de cárcel es preocupante, lo cual empeora si el menor es imputado como un adulto, ya que recibirá sanciones más estrictas, como aquellas que recibiría un adulto. Es importante que se asegure de obtener la mejor representación legal para garantizar que su hijo no sea imputado como un adulto y de serlo, defenderlo de las posibles sanciones.
Si su hijo ha sido arrestado, imputado, o está enfrentando cargos en un sistema penal de adultos; debe contactarnos lo antes posible para que ejerzamos su representación. En Orange County Criminal Defense, estamos conformados por un grupo de abogados con una vasta experiencia en delitos de esta naturaleza, los cuales hemos logrado una gran cantidad de resultados favorables. Además de ayudarlo a desarrollar una defensa convincente contra las acusaciones, nos enfocamos en lograr que sea satisfecho el interés superior de nuestros clientes; por lo que puede estar seguro de que su hijo estará adecuadamente representado durante el proceso judicial.
¿Qué debe saber sobre el sistema judicial juvenil de California?
Los tribunales juveniles tienen la obligación legal de supervisar los casos penales de niños y adolescentes menores de dieciocho años de edad. Esta competencia está consagrada en el Código de Bienestar e Instituciones y comprende a los jóvenes de menos de 18 años que cometen un delito, pero se descubre una vez que han alcanzado la mayoría de edad. Si bien un joven menor de dieciséis años no puede ser imputado en un tribunal penal, si un menor de dieciséis años o más es acusado de cometer delitos que forman parte del artículo 707 WIC, puede realizarse una audiencia de transferencia, la cual le permite al juez determinar si las circunstancias ameritan que el niño sea juzgado en un tribunal de adultos.
El primer factor distintivo entre una condena de adultos y una condena juvenil es el propósito de la misma. En un tribunal de menores, el objetivo es la rehabilitación y reforma del comportamiento del menor mientras que en el de adultos, el objetivo es castigar al condenado.
La iniciativa de la justicia juvenil comenzó cuando los ciudadanos del estado de California aprobaron la proposición 21, la cual permite que los menores que cometen ciertos delitos sean procesados legalmente en un tribunal de adultos, siendo sometidos a las mismas sanciones estipuladas para los delitos según el delito. Queda a discreción del juez determinar si un joven de 14 años de edad o más puede ser juzgado como mayor de edad si comete ciertos delitos específicos. Adicionalmente, la ley señala los delitos que serán automáticamente imputados ante un tribunal de mayores de edad cuando son cometidos por menores. De conformidad con el art. 707 (b) WIC, los delitos que pueden conducir a que el niño sea procesado en un tribunal de adultos, incluyen los siguientes:
- Delitos de homicidio, tales como asesinato y homicidio voluntario.
- Robo.
- Tortura.
- Todos los delitos cometidos contra una persona mayor de 60 años o discapacitados conforme al artículo 1203.09 del Código Penal.
- Una violación del artículo 11055 (e) HS que involucre la fabricación, distribución, o composición de una sustancia controlada mayor a media onza.
- Secuestro con daño corporal o con fines de robo, agresión sexual, robo de auto o cobro de rescate.
- Asalto y agresión con un arma mortal.
- Mutilación agravada.
- Violación o sodomía mediante fuerza que cause daño físico.
- Felonías violentas que estén relacionadas con pandillas criminales, conforme al artículo 186.22 (b) PC.
- Si un menor utiliza personalmente un arma de fuego durante la comisión de una felonía, el delito se considera agravado y puede ser imputado en el tribunal de adultos.
- Escape de una institución juvenil mediante el uso de violencia, infligiendo lesiones a los empleados de la institución.
Los delitos señalados en el art. 707 (b) WIC son 30. Si su hijo es arrestado o actualmente está enfrentando cargos por un delito, debe consultar a un abogado penalista para una evaluación de su caso, con la finalidad de determinar si el delito está comprendido en esta disposición. Adicionalmente, el fiscal puede presentar una acusación directamente en el sistema judicial de adultos si el niño es sospechoso de cometer ciertos delitos, los cuales incluyen asesinato y ciertos delitos sexuales que involucran violencia, daño corporal y otros factores agravantes.
¿Qué debe saber sobre el procedimiento del tribunal de menores?
La mayoría de los casos de menores empiezan en un tribunal de delincuencia juvenil y si se requiere, pueden ser enviados a un tribunal de adultos. El proceso judicial de delincuencia juvenil de California conlleva 4 audiencias o más dependiendo de la naturaleza del delito. Estas son; la de detención, transferencia, adjudicación y disposición, sucesivamente.
En primer lugar, una audiencia de detención es realizada para determinar si el delito del menor le permite ser liberado o si debe permanecer bajo custodia judicial a la espera del juicio. La liberación bajo fianza no aplica para los casos de delincuentes menores de 18 años. Además, los menores arrestados deben ser presentados ante el tribunal en las 48 horas siguientes de su arresto. Si el delito es una infracción, es probable que el menor sea liberado en una audiencia de detención. Pero si el delito es grave, el caso procederá a una audiencia de transferencia.
La audiencia de transferencia tiene el objetivo de determinar si el menor será juzgado en un tribunal de delincuencia juvenil o en un tribunal penal de adultos. El proceso mediante el cual el tribunal de menores determina esto es conocido como transferencia judicialmente controlada. Una vez que el juez emite su decisión, el caso procede al tribunal mencionado dependiendo del veredicto del juez. Si se determina que el caso debe continuar en un tribunal de menores, se realizarán las siguientes audiencias, de modo que será juzgado y sentenciado conforme a las sanciones del tribunal de menores. La competencia de este tribunal culmina cuando el joven alcanza los 21 años de edad.
Es importante destacar que, aquellos jóvenes que sean condenados en un tribunal de adultos también serán acusados en este tribunal si vuelven a cometer delitos, independientemente de la naturaleza del siguiente delito. Adicionalmente, ciertos delitos serán imputados directamente en un tribunal de adultos si el menor es mayor de catorce años. Esto exonera al joven de ser un pupilo del tribunal y atravesar el proceso judicial del tribunal de menores. Sin embargo, si el delito no es una felonía grave, puede ser manejado en el tribunal de menores y transferido al tribunal de adultos luego de que el menor pierda la audiencia de transferencia.
¿En qué consiste la audiencia de transferencia?
Cuando un menor es arrestado, la policía puede dejarlo ir con una simple advertencia o remitir el caso al Departamento de Libertad Condicional del condado si es una felonía. Posteriormente, se presenta una petición en contra del menor en esta etapa, la cual es similar a una acusación formal en un tribunal de adultos.
Generalmente, mediante la transferencia fiscal discrecional, el fiscal puede imputar al menor directamente en un tribunal de adultos o iniciar la audiencia de transferencia para que el juez sea quién determine si el menor será juzgado en un tribunal de delincuencia juvenil o de adultos. Si este determina que el menor se beneficiaría de los programas de rehabilitación de delincuentes juveniles, la fiscalía tendrá la carga de probar si el menor no es apto para el juicio del tribunal de menores y por lo contrario requiere un enjuiciamiento más estricto en el tribunal de adultos.
Por su parte, los padres del menor tienen derecho a asistir a las audiencias. Si el abogado del menor no logra probar que el caso debe ser juzgado en este tribunal, el juez autoriza un proceso judicial de adultos.
Para que el respectivo fiscal pueda iniciar una audiencia de transferencia, deben cumplirse los siguientes requisitos:
- El menor debe tener mínimo dieciséis años y haber cometido un delito señalado en el artículo 707 (b) WIC.
- Debe haber tenido 14 años de edad o más cuando cometió el delito y no haber sido arrestado hasta que tenía 18 años o más.
- Si un menor que anteriormente fue un pupilo de tribunal, comete una felonía; será declarado no apto para ser juzgado en el tribunal de menores.
El juez determinará si el menor será juzgado como adulto previa evaluación de estos factores:
- El historial delictivo del menor.
- Si el menor se beneficiaría o reformaría con la rehabilitación brindada por el tribunal de menores.
- El nivel de complejidad reflejado por las acciones del menor en la comisión del delito.
- Si no es su primer delito, el juez considera si los intentos pasados de rehabilitarlo tuvieron éxito.
- La gravedad del delito por el cual está siendo acusado.
Si el menor pierde la audiencia de transferencia, puede presentar una petición para impugnar la decisión del juez, la cual debe ser presentada ante el tribunal en los veinte días siguientes a la audiencia de transferencia. Si su hijo ha sido acusado de cometer una felonía pero el juez considera que el caso debe ser juzgado en el tribunal de menores, es posible que imponga un confinamiento en la División de Justicia Juvenil, la cual cumple la función de una prisión para los menores condenados. Esta forma parte del Departamento de Correcciones y Rehabilitación de este estado y los menores permanecen bajo la competencia de la misma hasta alcanzar los 25 años de edad.
¿En qué consiste el proceso judicial penal para mayores de edad?
Cuando los menores son acusados como adultos, son enjuiciados en el tribunal penal conforme a un procedimiento establecido. Existe una diferencia con respecto al proceso que deberá atravesar el menor en un tribunal de adultos con respecto al del tribunal de menores. Generalmente, este comienza con el arresto, seguido por la imputación de cargos por parte del fiscal, la audiencia de lectura de cargos, el juicio, el veredicto y la sentencia. Finalmente, el menor que ha sido declarado culpable tiene la oportunidad de apelar.
- Arresto. Al igual que en el sistema juvenil, un juicio penal comienza con un arresto realizado por la policía, la cual debe indicarle al delincuente la causa del arresto. Posteriormente, el oficial que efectúa el arresto debe elaborar un informe escrito que contiene la causa probable para el arresto y otra información relevante como los nombres de los testigos. El fiscal procede con el caso y con base en el informe policial, decide los delitos que imputará al acusado.
- Presentación de la acusación. Debido a que el acusado tiene derecho a un juicio expedito, el fiscal del distrito debe presentar los cargos dentro de las 48 horas siguientes al arresto; con la excepción de feriados, días de cierre judicial obligatorio o fines de semana.
- Lectura de cargos. El acusado comparece ante un tribunal por primera vez para ser notificado de los cargos que han sido presentados en su contra. Además, será informado de las leyes que ha quebrantado y derechos constitucionales durante el proceso, incluyendo el derecho a un abogado y que el juez le asignará uno si no tiene la posibilidad de costearlo. Posteriormente, el menor puede contestar los cargos. Un abogado defensor lo asesorará sobre cuál es su mejor opción según las circunstancias de su caso.
Asimismo, declararse culpable significa que el acusado acepta que ha cometido el delito que le ha sido imputado, tras lo cual automáticamente es condenado y culmina el proceso. Por otro lado, declararse no culpable significa que el acusado desea que el fiscal pruebe los cargos por encima de la duda razonable en un juicio, pudiendo también ser una estrategia para comenzar las negociaciones para una reducción de cargos. Por último, una declaración de no oponibilidad significa que el acusado está de acuerdo con la acusación presentada. A diferencia de la declaración de culpabilidad, la declaración de no oponibilidad no puede ser utilizada por la víctima para interponer una demanda civil.
- Audiencia preliminar. El juez realiza una audiencia preliminar si el caso no se resuelve en la etapa de lectura de cargos, la cual contribuye a determinar si la fiscalía tiene evidencias convincentes en contra del acusado antes de proceder a la etapa de juicio. Una vez que se establezca la existencia de suficientes evidencias, el fiscal presenta una moción que inicia otra lectura de cargos en el tribunal. Antes del juicio, la defensa y la fiscalía deben intercambiar información sobre el caso en un proceso denominado descubrimiento. El abogado del acusado puede entonces analizar las evidencias y desarrollar su defensa. Adicionalmente, ambas partes pueden presentar mociones para retirar la acusación, cambiar su declaración, o suprimir pruebas específicas. En esta fase, tanto el acusado como la fiscalía pueden optar por llegar a un acuerdo extrajudicial o acceder a un acuerdo de culpabilidad para la reducción de sus cargos o sanciones.
- Juicio. Si el caso continúa luego de la audiencia preliminar, procede a la etapa de juicio. Si el menor sigue estando bajo custodia, el juicio debe realizarse en los 30 días siguientes a la lectura de cargos. Si el acusado no está bajo custodia policial, el juicio debe programarse en los 40 días siguientes luego de la lectura de cargos. Por su parte, el acusado decide si prefiere un juicio dirigido por un jurado o por un juez. La mayoría de los acusados prefieren un jurado debido a que estos son más tendientes a considerar su edad, lo cual incrementa sus probabilidades de ser declarado no culpable. Los miembros del jurado son elegidos por los abogados y se requiere que sean imparciales y justos. Aunque los menores no tienen derecho a tener un juicio con un jurado, existe una excepción si son juzgados en una corte de adultos. Sin embargo, en circunstancias específicas, se requiere que se emita una decisión estricta.
Además de declararse culpable antes del juicio, la otra forma en la cual un acusado puede ser declarado culpable es si el juez o jurado lo decide luego de finalizar el proceso judicial. Durante el juicio, ambas partes presentaron evidencias y testigos para respaldar sus versiones. Luego de lo cual, los abogados emiten sus declaraciones de cierre y el jurado procede a decidir si el acusado es culpable o no culpable de los cargos imputados. Una vez que se emite el veredicto, si el acusado es declarado no culpable, es absuelto de los cargos en su contra. Cabe destacar que el arresto y la absolución permanecerán en su historial. Para lograr la eliminación de estos, debe presentar una moción denominada “hallazgo de inocencia” para probar su inocencia de hecho. Por su parte, si el acusado es declarado culpable por encima de la duda razonable, se procederá a imponer las sanciones apropiadas.
- El proceso de la apelación. Si su hijo es enjuiciado y declarado culpable, aún existe una probabilidad de probar su inocencia presentando un recurso de apelación. Consulte con un abogado penalista competente para saber si existe la posibilidad de obtener un resultado favorable si apela la decisión. Su abogado también le informará de los requisitos del recurso de apelación y el lapso para su presentación.
¿Cuáles son las sanciones previstas para los delitos por los cuales un menor puede ser juzgado como adulto?
Si un menor es enjuiciado en una corte de adultos, estará expuesto a las sanciones previstas para los adultos acusados por los mismos delitos. Esto puede incluir libertad condicional, cuantiosas multas y penas de cárcel, incluyendo cadena perpetua con la posibilidad de libertad condicional. También puede serle impuesto una combinación de las sanciones mencionadas. La sanción exacta generalmente depende del delito específico, factores agravantes y los antecedentes penales del acusado. Algunos delitos incluso acarrear aumentos de pena, los cuales someterán al menor a sanciones mayores.
¿Los menores pueden ser condenados a muerte?
En el estado de California, un individuo que ha cometido un delito siendo menor de 18 años nunca puede ser elegible para la pena de muerte, sin importar las circunstancias del delito, ya que se considera inusual, cruel y una violación de la Octava y Cuarta Enmienda de la Constitución de los Estados Unidos. Adicionalmente, el juez no tiene permitido imponer una cadena perpetua, sin la posibilidad de libertad condicional salvo que el delito sea el de homicidio.
¿Cuáles son las semejanzas y diferencias del juicio de adultos y la adjudicación juvenil?
- Semejanzas. Tanto los menores imputados ante el tribunal penal de adultos, como aquellos que son procesados en el tribunal de menores, tienen ciertos derechos similares, incluyendo los siguientes:
- El derecho a ser informado del delito por el cual es acusado y los cargos en su contra.
- El derecho a tener representación legal. Si el acusado no puede costear un abogado, se le asignará un defensor público.
- El derecho a brindar información autoincriminatoria.
- El derecho de contrainterrogar a los testigos que declaren en su contra.
- Para que el acusado sea condenado, el fiscal debe probar su culpabilidad por encima de la duda razonable.
- Diferencias. Los términos de un procedimiento juvenil son distintos a los utilizados en el procedimiento de adultos. Por ejemplo, cuando un menor comete un delito por primera vez, este es denominado un “acto delictivo”, mientras que en el caso de un adulto se trata de un crimen. Por otro lado, a diferencia de los adultos que enfrentan un juicio, en un tribunal de delincuencia juvenil este equivale a una audiencia de adjudicación. Adicionalmente, los casos de jóvenes son decididos exclusivamente por un juez, debido a que la ley no permite la presencia de jurados para los casos de menores de edad. Aunque los menores no tienen derecho a un juicio con jurado, existen ciertas excepciones, ya que, un juicio con jurado suele ser posible para los adolescentes que son imputados o transferidos a un tribunal de adultos. Por último, los delincuentes menores de edad no tienen derecho a un juicio público ni a ser liberados bajo fianza.
¿Cómo encontrar asesoría legal cerca de mí?
Aunque el tribunal de delincuencia juvenil está diseñado para evitar que los menores sean condenados en tribunales de adultos, la naturaleza del delito puede conducir a que ello sea necesario. En consecuencia, si usted es un menor o tiene un hijo que enfrenta cargos penales, debe asegurarse de contratar a un abogado litigante. Independientemente de que los cargos sean presentados en un tribunal de adultos o de jóvenes; pueden afectar negativamente la vida del acusado a largo plazo. Por lo que debe contactarnos para que evaluemos su caso y desarrollemos una defensa sólida para combatir los argumentos de la fiscalía.
Contacte a Orange County Criminal Defense para su primera consulta; llamando al 714-467-2772.